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Una
de las aeronaves más llamativas de la exposición
estática era el PA-31 Navajo VR-22 del INAC (foto
Esteban Brea). |
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El 3 y 4 de
septiembre, la II Brigada Aérea abrió sus puertas para permitir
la visita del público. El material expuesto sobrepasó
ampliamente las expectativas generadas previo a la muestra. De
la misma formaron parte aeronaves de varias fuerzas armadas y de
seguridad (no solo de la Fuerza Aérea), algo que no ocurría
desde hace mucho tiempo.
La muestra estática estaba
integrada por material de dotación de la brigada, compuesto por
aviones Learjet 35A y e IA-50 G-II. Curiosamente, los Fokker F.27 pudieron ser vistos dentro de un hangar pero no
formaron parte de la muestra. Otras unidades de la FAA hicieron
sus aportes: La Escuela de Aviación Militar se hizo presente con
dos EMB-312 Tucano y el INAC con ejemplares Cessna 182, PA-31
Navajo, PA-34 Séneca y PA-28 Arrow. Las VII y III brigadas
enviaron un UH-1H Huey y un IA-58 Pucará, respectivamente.
El Ejército expuso sus OV-1D Mohawk
y UH-1H Huey, mientras que la Armada se hizo presente con un
S-2E(T) Turbo Tracker, lo que aportó gran colorido y variedad
temática a la muestra. Las fuerzas de seguridad fueron
representadas por un Cessna 150 de la Gendarmeria y un Schweizer
300C mas un MBB Bo-105 de la Policía de Entre Ríos. Las jornadas
contaron con una nutrida presencia de aeronaves civiles tanto de
aeroclubes locales como de la República Oriental del Uruguay.
También se habilitaron los hangares para expositores locales.
Allí se pudo apreciar el equipamiento del Grupo 1 de
Comunicaciones Escuela, la Red de Observadores del Aire y los
distintos institutos de formación de la Fuerza Aérea.
Las exhibiciones en vuelo
comenzaron con un KC-130 Hercules que realizó lanzamientos de
paracaidistas. Los shows acrobáticos estuvieron a cargo de
biplanos Pitts tripulados por Jorge Malatini y Fernando
Rampezotti y un Su-29AR de la Escuadrilla Cruz del Sur. Los
Tucano ejecutaron una precisa rutina de vuelo en formación
cerrada mientras que el Séneca y el Arrow del INAC realizaron
varios pasajes a baja altura. Por la tarde el sonar de la sirena
de bombardeo de la base anuncio un inminente ataque de dos
Finger IIIB provenientes de Tandil. Estos deleitaron al público
presente con sus clásicos vuelos rasantes. Seguidamente, dos
Learjet 35A abandonaron la exposición estàtica para realizar
algunos pasajes en formación intercalados con un solitario G-II
proveniente de la ciudad de Mar del Plata. La jornada fue
cerrada por el vuelo de un globo aerostático cautivo y los
acordes de la banda musical de la II Br Aé. |
