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"Foto Blog" de Fernando L. Puppio Guzmán y José I. Longo | |||||||||||||||
(Zaragoza & Tucumán, 8 de julio de 2008). Cielos Airlines, empresa de transporte de carga aérea peruana, ha venido realizando diversos vuelos desde el aeropuerto “Benjamin Matienzo” (SANT/TUC) de la ciudad de Tucumán. El origen y destino final de los vuelos fue Estados Unidos, aunque con escalas intermedias a lo largo del continente sudamericano. La carga trasportada en estos vuelos fueron granos de maíz transgénicos. De esta manera, se dio continuidad al transporte de carga aérea desde Tucumán, ya que LAN CARGO realizó tres vuelos para el transporte de frutas frescas a los Estados Unidos en diciembre del año pasado.
Cielos Airlines fue fundada en 1997 como una empresa dedicada al transporte no regular de carga aérea internacional, especializada en productos perecederos. Inicialmente operó tres Boeing 707 propios y un MD-11 en “wet lease” (alquiler con tripulación), pasando más tarde a volar con DC 10-30F en la modalidad de “dry lease” (alquiler sin tripulación). Sus destinos habituales incluyen las principales capitales de Latinoamérica, Miami y Los Ángeles en Estados Unidos. También existe una conexión con Luxemburgo y se realizan vuelos charter como los realizados a Tucumán. Según la compañía, su listado de clientes habituales incluye a los principales forwarders mundiales, así como a las más reconocidas empresas de Carriers, lo cual indudablemente le garantiza una importante carga de trabajo. Los vuelos a Tucumán fueron realizados principalmente con dos aeronaves: El DC-10-30 N609GC (c/n 46932, l/n 158) y el DC-10-30CF OB-1749 (c/n 46891 l/n 127). El primero de ellos voló por primera vez el 20 de mayo de 1974 y fue convertido a la versión carguera en el 2000. El segundo, por su parte, voló por vez primera el 25 de septiembre de 1973 y el 6 de julio de 2003 sufrió un accidente durante el aterrizaje en el aeropuerto “Afonso Pena” (SBCT/CWB) de Curitiba (Brasil). La aeronave derrapó sobre la pista 15, de 2.215 metros de longitud, y acabó por detenerse unos 300 metros más allá de la cabecera 33. La aeronave resulto con daños en el motor número uno y en el tren de aterrizaje ya que colisionó con las antenas del sistema de aterrizaje por instrumentos "ILS" (para ver una foto del accidente, pulse aquí). Ambas aeronaves cuentan con un extenso historial, pues en sus 34 años de vida, pasaron por numerosas compañías aéreas, fueron rematriculadas numerosísimas veces y llevaron una gran diversidad de esquemas de pintura a lo largo de los años. Para el aeropuerto de Tucumán, su presencia representó un nuevo paso en su consolidación como estación de referencia en el Noroeste Argentino. Queda claro que la aeroestación tucumana es una opción valida para la exportación vía aérea y desde ya es deseable que este tipo de operaciones no solo se repitan, si no que se transformen en vuelos regulares de carga con destino al exterior. |
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Nuestra imagen de apertura |
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Alejandro Drigani colaboró en la elaboración de este informe. También consultamos Aeropuerto Internacional de Tucumán (blog), Airfleets, Airliners, Aviation Safety Network, Cielos Airlines y JetPhotos. |
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