"Flight critic" de Carlos Ay

Santiago de Chile (14/5/2007). Cuestiones de trabajo me llevaron a viajar entre Santiago de Chile (SCL) y Concepción (CCP) en la primera semana de septiembre de 2006. A diferencia de otras ocasiones en las cuales visité la segunda ciudad más importante de Chile, el viaje tuvo lugar en aeronaves de la línea europea Airbus (mis dos viajes anteriores a "Conce" fueron en Boeing 737-200). Claro que no era esta la idea inicial: El itinerario contratado contemplaba una solución mixta: ida en Boeing (LA 213) y regreso en Airbus (LA 206).

Pero el vuelo de ida fue cancelado y la compañía decidió reubicarme en un vuelo que partía 20 minutos antes del itinerario original. Es interesante observar que todo este cambio se resolvió en un par de horas, el mismo día del vuelo y con la intermediación de una agencia de viajes que debió transmitirme el anuncio de la reprogramación desde la aerolínea y recorrer el camino inverso para confirmar mi aceptación del cambio. El resto de mis preparativos para ambos vuelos fueron totalmente rutinarios. Gracias a la tecnología web desplegada por LAN, el pre-chequeo lo hizo nuestra secretaria con su navegador Internet y un lector de archivos PDF. La única objeción que tengo es respecto del pre-embarque, ya que me negaron el cambio de asiento a salida de emergencia aduciendo que los pax pre-chequeados deben solicitarlos en otro mostrador que, por supuesto, tenía bastante más cola que la fila de pre-chequeados web...

El vuelo de ida fue definitivamente rutinario, aunque destaco que se trató de mi primer vuelo en el A320 matriculado CC-COI. El embarque, rodaje y decolaje se efectuaron en horario y el servicio de abordo se ciñó a las limitaciones que impone un trayecto de 45' de vuelo: Sandwich frío con agua mineral o jugo; más gaseosa, café o té. El regreso también fue relativamente monótono, aunque destacó por ser mi segundo vuelo en un A319 y que el aparato en cuestión era la más reciente incorporación a la flota de LAN: El CC-CPM, que llegó a Chile a fines de agosto. También llamó mi atención el nuevo video de seguridad en vuelo de diseño digital que emplea la compañía en este modelo de avión.

En la revista de abordo (Revista "in", septiembre de 2006), Enrique Cueto (CEO de LAN) celebraba el primer vuelo a Miami y la incorporación de más aparatos A320 a la filial argentina de la empresa. Según el ejecutivo chileno, el vuelo a MIA es el "comienzo de la expansión internacional de LAN Argentina", proceso que contempla el inicio de vuelos a otros destinos "tales como São Paulo y Santiago". Respecto de los A320, Cueto aseguraba que su incorporación totalizará cuatro aeronaves para fin de año. El editorial cerraba con un discurso entre político y marketinero en el que asevera que, en poco más de un año de vida, "LAN Argentina ha ido cumpliendo el compromiso que hizo al país de permitirles (sic) contar con una línea aérea que lo conectara internacionalmente con elevados estándares de seguridad y un servicio de clase mundial".

Observaciones en tierra

A mi paso por SCL, pude comprobar que se estaban realizando obras civiles tanto en el acceso a la terminal nacional como en la plataforma de vuelo (o "loza", como se la conoce localmente), lo que hacía más complicado el desplazamiento de pax y algo más lento el movimiento de aeronaves cerca del extremo Este. Un rasgo característico y novedoso era el anuncio que por circuito cerrado de televisión informaba que la recientemente promulgada la ley de tabaco, que prohíbe fumar en en todo el aeropuerto.

En la plataforma de vuelo pude observar una pequeña muestra de las aeronaves que típicamente operan en la capital chilena: Un Boeing 737-500 de Aerolíneas Argentinas, un Boeing 737-200 (CC-CJP) de Aerolíneas del Sur, dos Boeing 777 de American Airlines, un Boeing 777 de Delta Airlines, un Airbus A319 (CC-CPE), tres Airbus A320 (CC-COC, COF y COI), seis Boeing 737-200 (CC-CQT, CRP, CSH, CVG, CVJ y CYK) y un Boeing 767-200 de LAN; más dos Boeing 737-200 (CC-CTH y CTI) de Sky Airlines. La plataforma de cargas mostraba un Boeing 767 de LAN Cargo y un McDonnell Douglas MD-11 de Varilog. El sector de mantenimiento estaba lleno de aeronaves de LAN (incluyendo dos de sus Airbus A340) y también mostraba un Boeing 727-200Adv. totalmente blanco de Star Airline (debería ser el CC-CPV "Padre Alberto Hurtado").

En el sector de aviación general pude observar un Navajo Panther de Aerocardal, el magnífico PBY-5A Catalina (CC-CDT/32) de Aeroservicio Parrague, el DHC-6 Twin Otter panorámico de Los Cedros Aviación (CC-CST) y un CitationJet privado de origen brasileño (PR-EDB). En la plataforma militar, ubicada en el extremo Norte del aeropuerto, se apreciaban tres C-130 Hercules (uno gris y dos cammo "Europe 1"), un Boeing 707 (gris) y el Boeing 737-500 gris de la Fuerza Aérea; más un Gulfstream III o IV que no logré identificar.

La principal novedad del viaje, sin embargo, fue la presencia de un helicóptero SA-330 Puma no identificado y un C-17 Globemaster III de la USAF que se apreciaban en la loza militar el día de mi partida a CCP. A riesgo de cometer una gaffe absoluta, estimo que se trataba de un helicóptero del Ejército de Chile que, repintado en el tradicional esquema "overall white" de las Naciones Unidas, se encontraba listo para desplegar en el carguero norteamericano hacia Haití, donde Chile y otras naciones de la región mantienen una fuerza de paz que intenta restaurar el orden político de esa conflictiva nación caribeña.

Las sorpresas no acababan allí; ya que el carguero no era un C-17 cualquiera. Matriculado 05-5145, el aparato es uno de los más nuevos salidos de la línea de producción de Long Beach; ya que lleva número de construcción P-145 y, desde su entrada en servicio el 13 de enero de este año, porta el sobrenombre “Spirit of Ronald Reagan” con el cual lo bautizó la ex-primera dama, Nancy Reagan. Proveniente de March AFB, Riverside (California, EE.UU.) el aparato portaba escudos y marcas distintivas de la 452nd Air Mobility Wing.

CCP, por su parte, se mostraba muy tranquilo. Entre los residentes, destacaban el SP-2H Neptune anti-incendios de Heliworks (CC-CHU/03) y media docena de aeronaves livianas del Club Aéreo de la Universidad de Concepción. Entre lo que asumo constituía tráfico visitante, resaltaban un Citation II de Aerocardal y un helicóptero Bell 204 o 205 no identificado que lucía esquema de pintura blanco con vivos de distintos colores.

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