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| Iluminado por el sol otoñal de
Escocia, el EJC-123 descansa brevemente en una escala previa al
salto del Atlántico Norte. |
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Evidencias fotográficas
obtenidas en el aeropuerto internacional de Glasgow (Escocia) nos
permiten aseverar que las fuerzas armadas de Colombia acaban de recibir
su tercer carguero C-212 Aviocar excedente del Ejército del Aire
Español (EdA). La entrega sería parte de un paquete de asistencia
militar comprometido por el gobierno español en diciembre de 2004, en
cuyo marco ya se habían donado a Colombia otros dos aparatos similares
(uno al Ejército y otro a la Armada).
La aeronave en cuestión
fue detectada el viernes 18 de noviembre mientras se trasladaba desde
Madrid/Cuatro Vientos a Bogotá/El Dorado en vuelo ferry. La máquina
lucía esquema de pintura gris "wrap around" con matrículas y títulos del
Ejército de Colombia en negro y la bandera nacional a todo color en el
timón de dirección. En el lateral izquierdo del fuselaje, se observaba
un autoadhesivo que hacía referencia al traslado del aparato desde la
Maestranza Aérea de Madrid (Cuatro Vientos) al Batallón de Aviación No.1
"Aviones" (Bogotá). A diferencia de sus dos predecesores, que llegaron a
Bogotá en el primer semestre del año por la vía marítima, el aparato se
desplazaba en vuelo por la ruta del Atlántico
Norte (Glasgow, Reykjavik, Groenlandia, Canadá).
Su número de serie
(212-21-46), identifican al EJC-123 como un C-212 serie 100 que prestó
servicio con el EdA con matrícula T.12B-27 y códigos de unidad tales
como 461-27, 46-27 y 46-33. Recibido por esa fuerza en la década de
1980, originalmente lucía el esquema de pintura de cuatro tonos (superficies
superiores arena,
caqui y verde oliva con vientre gris) típico de los escuadrones Aviocar
españoles de aquel tiempo. En 1994, fue recorrido y repintado en un
esquema gris oscuro similar al que lucía durante su traslado a Colombia.
Hasta donde hemos podido averiguar, el aparato siempre prestó servicio
en el Escuadrón 461 del Ala 46, que pertenece al Mando Aéreo de Canarias,
y operó desde
Las Palmas/Gando (Isla Gran Canaria) hasta su reciente baja y posterior donación a Colombia.
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| Sticker alusivo al
traslado del EJC-123 desde Madrid a Bogotá. |
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Todo indica que, una
vez llegado a Colombia, el aparato se integrará a la Compañía Delta del
Batallón de Aviación No.1, que opera desde el sector militar del
aeropuerto internacional de Bogotá. Con estas tres donaciones, la
población militar colombiana de Aviocar se eleva a siete
ejemplares, ya que estos aparatos se suman a dos ejemplares serie 200 y
dos serie 300 que la Fuerza Aérea Colombiana opera en su aerolínea de
fomento, SATENA.
Al igual que sus dos
predecesores, el aparato será empleado primariamente para realizar
evacuaciones aeromédicas; aunque el gobierno colombiano no descarta su
empleo para el transporte de tropas y otras tareas militares, según lo
exijan las circunstancias. Gracias a su autonomía de poco más de cinco
horas, su capacidad de transportar hasta doce camillas y a que pueden
aterrizar en pistas cortas, estos Aviocar permitirán a las fuerzas
colombianas "mejorar su capacidad para salvar la vida de efectivos
que resulten heridos en combate", según afirmó el Ministro de
Defensa combiano, Jorge Alberto Uribe Echavarría, al recibir en mayo los
dos primeros ejemplares.
Los programas de ayuda
militar de España a
Colombia datan de principios de 2003 y, hasta la fecha, habrían
permitido a la nación caribeña echar mano de tres cargueros C-212,
adquirir equipos de lucha contra el terrorismo de última generación,
participar de un intensivo esquema de intercambio
de oficiales para su formación en inteligencia y lucha antiterrorista;
como así también recibir información en tiempo real de satélites
españoles de observación y comunicaciones que sobrevuelan su territorio.
En 2003 se discutió la cesión de ocho cazas Mirage F-1 excedentes del
Eda; pero Colombia parece haber preferido concentrarse en donaciones e
intercambios más focalizados en la lucha contra el terrorismo y el
narcotráfico.
Carlos Ay
Fotografías de
Iain Mackenzie
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